Los aviones eléctricos podrían llegar antes de lo que piensas

Grandes corporaciones trabajar para que en 2022 podamos ver el primer avión eléctrico con espacio para 27 pasajeros y vuelos de 1.200 kilómetros de distancia.
21 feb 2018
Los aviones eléctricos podrían llegar antes de lo que piensas
Los coches eléctricos cada vez forman más del presente en nuestra sociedad, estos vehículos cada vez son más potentes y aunque todavía estamos expectantes de ver la madurez industrial en el tema de la capacidad de la baterías es cierto que año a año se está consiguiendo mayor autonomía.

Pero aunque solo oigamos hablar del coche eléctrico paralelamente y usando una tecnología similar se está trabajando para conseguir aviones eléctricos, si si has oído bien, los aviones eléctricos serán los aviones del futuro y comenzarán a verse antes de lo que pensamos.

Los aviones del futuro ya no son tan del futuro

En la actualidad son varias las empresas que están trabajando en este campo, algunas compañías han nacido con la intención de ser el Tesla del sector aeronáutico y por otro lado empresas con experiencia en el sector como Boeing y JetBlue Airways han aunado fuerzas bajo el proyecto Zunum para conseguir la fabricación y comercialización de las primeras aeronaves eléctricas en 2022 con espacio para 27 pasajeros y vuelos de 1.200 kilómetros de distancia. En 2030 prevén ampliar esta distancia hasta los 1.600 kilómetros con la posibilidad de ser conducido de forma remota.

El avance en el sector de los “aviones del futuro” es algo que beneficia a todas las partes, según coinciden algunas compañías, estas ventajas son:

Menor ruido al despegar y aterrizar. Los motores eléctricos para aviones no emiten ruido con lo que eliminamos la contaminación acústica y además esto permitiría el acercamiento de los aeropuertos a las ciudades y viceversa.

Ahorro en combustible. Las compañías indican que los aviones eléctricos de transporte regular disminuirían el peso y el coste en en combustible gracias a la utilización de baterías.

Menos contaminación. Si eliminamos el queroseno de la ecuación conseguimos un gran avance en el campo de la eficiencia energética y una enorme reducción de la contaminación en el sector aeronáutico.

Más años de servicio. Las compañías indican que gracias esta tecnología y sus avances los aviones eléctricos podrán durar mucho más, en la actualidad tienen una vida útil de 30 años.

Bajada de los precios. En consecuencia del ahorro de combustible y de la mayor durabilidad de los aviones se prevé que las tarifas se puedan verse reducidas entre un 40% y un 80%. Esta democratización en los precios podrá ser un factor que beneficie el sector del turismo entre otros.

Mentes disruptivas y tecnología del futuro

Como si de películas futuristas se tratara, compañías como Airbus o el mismísimo cofundador de Google Larry Page con su proyecto Zee.Aero están invirtiendo en “coches voladores”.

El concepto de estos aviones que plantean van ligados al transporte público. Se trata de pequeños aviones eléctricos destinados al transporte de una o cuatro personas sobre las zonas urbanas con pilotaje autónomo.

El objetivo de estos aviones del futuro es introducir la movilidad aérea en zonas urbanas con el objetivo de descongestionar los centros de la grandes ciudades.

Ya veremos en los próximos años si estas ideas futuristas avanzan y si somos capaces de asimilar tanta evolución en poco tiempo. Lo que si nos queda claro es que cada vez más el futuro estará ligado a la electricidad como medio de energía y con ello la eficiencia energética como medio de convivencia ante la contaminación ambiental.