Contenedores de reciclaje: tipos, colores y significado
El reciclaje
Es en este momento cuando el reciclaje entra en acción. Esta práctica es una de las más conocidas e interiorizadas del conjunto de «erres», los verbos principales de teorías y prácticas como el desarrollo sostenible y la economía circular. En pocas palabras, el reciclaje toma los residuos de bienes que ya se han utilizado y, en lugar de terminar su vida útil abandonados en un vertedero, los utiliza como materias primas para producir más bienes. Y así de forma constante. La vida útil tradicional y lineal de los productos se rompe a favor de un ciclo infinito de producción, uso y producción a partir del desecho.
¿Qué va en cada uno de los contenedores de reciclaje?
Para que los ciudadanos pudieran incorporar el reciclaje a su vida diaria, se desarrollaron una serie de contenedores de reciclaje para distintos residuos, diferenciados por distintos colores y formas. Tras separar la basura en los hogares en diferentes bolsas, basta con depositarlas en dichos cubos.
Estos contenedores de reciclaje pueden presentarse en diferentes formas como:
- De carga: dependen del lugar en el que se encuentren o la forma en la que el camión de recogida lo carga.
- Iglúes: tienen la forma redondeada característica —valga la redundancia— de los iglúes. Son los más habituales.
- Soterrados: estos contenedores de reciclaje se encuentran bajo tierra. Lo único que permanece en la superficie es la boca del contenedor.
- Bolseo: más que una forma de contenedor, es un sistema. Las bolsas se dejan en la calle y cuando pasa el camión de recogida, se cargan a mano.
- Recogida neumática: en este caso los residuos circulan por tubos subterráneos hasta el punto de recogida. Son los menos habituales.
Contenedores de reciclaje amarillos
En los contenedores de reciclaje amarillos se depositan envases de plástico — de yogur, mantequilla, limpieza, etc.—, envases metálicos como latas y briks, bandejas de porexpan, papel de aluminio, film transparente,…
Los residuos impropios que terminan en este contenedor por error suelen ser juguetes de plástico, biberones, chupetes, utensilios de cocina y cubos de plástico. En definitiva, elementos que están fabricados a partir de plástico.
En las plantas de selección, lo primero que se hace es separar los materiales reciclables de elementos como etiquetas y, acto seguido, los residuos se dividen en metales, plásticos y plásticos mezcla. Además, para optimizar el uso de colorantes, también se separan por colores.
Todos estos residuos se trituran, se lavan, se centrifugan y secan, se homogeneizan para lograr un color y textura parecidos y vuelven a depurarse una última vez, tras lo que finalmente se les da la forma y el color deseado. El producto suele destinarse a embalaje para juguetes, fibras para fabricar moquetas, y precintos.
Contenedores de reciclaje azules
Los contenedores de reciclaje azules acumulan los desechos de papel y cartón. En este caso, los principales residuos impropios de este tipo de contenedores de reciclaje son los briks —que como ya hemos dicho van en el amarillo— y las servilletas de cocina utilizadas —las cuales deben ir al marrón junto a los residuos orgánicos—.
En las plantas de recuperación, a los desechos se le aplican disolventes para que las fibras se separen. Acto seguido, se les arrebatan las impurezas para centrifugarlos y que los desechos se separen según la densidad de los mismos. Después se lavan y se elimina la tinta y, finalmente, se los blanquea.
El resultado se prensa en balas, que se distribuyen a las fábricas de papel para reiniciar su vida útil una vez más.
Contenedores de reciclaje verdes
En los contenedores de reciclaje verdes se almacenan los envases de vidrio, como aquellos que contienen perfumes o mermeladas.
En este caso particular, los residuos impropios son bombillas, espejos, ceniceros, vasos y demás elementos de la vajilla.
En las plantas de tratamiento, los residuos de vidrio se separan de las impurezas, pasan por una cinta magnética para atrapar cualquier resto metálico y se clasifica el vidrio por tipos. Finalmente, el vidrio es triturado y se convierte en polvo —conocido como calcín—.
Contenedores de reciclaje marrones
En los contenedores de reciclaje marrones se depositan residuos orgánicos de origen animal y vegetal como restos de comida y jardinería —pieles de frutas, espinas de pescado, cáscaras de huevo y servilletas usadas—. Estos desechos pueden convertirse en compost y ser reutilizados como abono o como biogás para generar energía eléctrica a partir de una fuente menos contaminante que los combustible fósiles.
Los desechos impropios que suelen terminar en el contenedor marrón son piezas de cerámica, colillas, chicles, arena para mascotas y pelo, entre otros.
Contenedores de reciclaje grises
Estos contenedores de reciclaje son el destino final de bienes que no pueden reciclarse ni utilizarse para fabricar compost: cds, envases de productos tóxicos como la pintura, pilas, etc. El contenido de estos cubos termina en los puntos limpios, de los que hablaremos más adelante.
Contenedores de reciclaje blancos
Estos pequeños contenedores también son conocidos como puntos SIGRE y se pueden encontrar en el interior de farmacias. Su finalidad es recoger los medicamentos caducados o que ya no nos resultan necesarios. Es muy importante que las medicinas desechadas vayan acompañadas de su caja original y del prospecto.
Contenedores de reciclaje naranja
Este tipo de contenedor de reciclaje es de los menos implantados. En él se recogen el aceite de cocinar usado. Para desecharlo en estos contenedores, debe estar correctamente embotellado.
Contenedores de reciclaje rojos
Por último, el contenedor rojo está destinado para los desechos hospitalarios, baterías, insecticidas, piezas electrónicas, etc.
Los puntos limpios
Los puntos limpios son aquellos lugares en los que se recogen, almacenan y separan diferentes tipos de residuos que podrían resultar peligrosos por su propia naturaleza si terminasen en contenedores tradicionales. Los puntos limpios pueden ser:
- Fijos: aquellos que se encuentran en zonas alejadas del centro de los municipios.
- De barrio: puntos limpios de menor tamaño ubicados en zonas cercanas a los ciudadanos.
- Móviles: vehículos de recogida de residuos con compartimentos que actúan como punto limpio.
Como puedes ver, existe un amplio abanico de contenedores de reciclaje; por ello, no tienes excusa a la hora de encargarte de tus residuos diarios de forma correcta, ecológica y respetuosa con el medioambiente y los recursos naturales. Reciclar resulta tan sencillo como reconocer el significado de una serie de colores, y este simple gesto puede marcar la diferencia.