3 formas de reducir emisiones de CO2
Es habitual que los distintos países incluyan medidas medioambientales en su agenda política y es que el cambio climático cada vez es más acentuado y mientras más tiempo transcurra sin cambiar nuestros hábitos para reducir las emisiones de CO2 peores serán las consecuencias.
La Comisión Europea establece los siguientes objetivos dentro del marco de clima y energía para 2030:
- Al menos 40% de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero (en relación con los niveles de 1990) .
- Al menos 27% de cuota de energías renovables..
- Al menos 27% de mejora de la eficiencia energética.
¿Seremos capaces de alcanzar estas metas para 2030? En lo que se refiere a las emisiones de CO2 te contaremos por dónde puedes empezar tú como ciudadano.
Pásate a la iluminación LED
Somos muy pesados, somos conscientes de ello pero, ¿has cambiado ya tus bombillas convencionales por LEDs? Si todavía no lo has hecho ahora es el momento.
Te recordamos que el pasado diciembre entraba en vigor en la prohibición de fabricación y venta de halógenos, un motivo perfecto para aprovechar y cambiar la iluminación de tu vivienda o negocio por una más eficiente.
Si hablamos de iluminación eficiente, ecológica y respetuosa con el medioambiente no cabe duda de que nos referimos a la tecnología LED. Duradera, resistente, no requiere de mantenimiento exhaustivo y no desprende ningún tipo de gas al encenderse. Además, se contempla un ahorro económico considerable en nuestras facturas al pasar de bombillas tradicionales a LEDs.
Apuesta por las compañías que comercializan energías renovables
Cada vez encontramos más compañías que ofrecen energías renovables. Como te hemos contado en distintas ocasiones tú como consumidor puedes elegir en qué mercado contratar tus suministros; ya sea mercado regulado o mercado libre es tu elección a qué oferta acogerte.
La población aumenta año tras año y con ello lo hace la demanda energética. Una demanda que cubrirla a partir de energías no renovables supone una emisión de CO2 desorbitada y muy perjudicial para el entorno además de otros impactos también nocivos, además de que los recursos son limitados, es decir, se agotan.
Así, una buena alternativa para hacer frente a esta demanda energética creciente es hacerlo mediante fuentes renovables cuyos recursos son ilimitados ya que se regeneran de forma natural en el medio.
Presta atención a tu forma de moverte
Nos referimos a que hagas más uso del transporte público y evites utilizar tu vehículo para desplazarte a trabajar cada día por ejemplo.
Y si no puedes vivir sin conducir existen alternativas sostenibles como el carsharing o motosharing que consisten en el alquiler de vehículos por un determinado periodo de tiempo, normalmente, minutos u horas. Tanto los coches como las motos que podemos encontrar en esta modalidad son eléctricos y por tanto sostenibles.
Recuerda que reducir las emisiones de CO2 está en nuestras manos y que sólo requiere de buenas prácticas. Reduce, reutiliza y recicla, las famosas “3 Rs” que nos ayudarán a realizar un consumo controlado que tiene en cuenta los límites del planeta.